María Ester Romero, la madre de Érica Soriano, la joven embarazada que hace 11 años desapareció en Lanús y por cuyo femicidio fue condenado a 22 años de prisión su pareja Daniel Lagostena, manifestó su alegría por el fallo de la Corte bonaerense que dejó firme la condena, pero aseguró que aún falta que alguien «se quiebre» para saber qué hicieron con el cuerpo de su hija.
«Me sorprendió, sabíamos que iba a presentar algún recurso, pero que haya quedado firme la sentencia también en la Corte es una muy buena noticia», dijo Romero (71) esta mañana a Télam, al enterarse del fallo por esta agencia.
«Justo estaba viendo un video que armó la gente de Lagostena diciendo que es inocente y me entero de esta noticia. Las palabras sobran», agregó la mujer.